PALACIO ICO
Teguise, Lanzarote
Entrar en el Palacio Ico es entrar en un universo de belleza y buen gusto.
Un lugar donde la belleza se construye a base de las imperfecciones de la cerámica hecha a mano, de la rugosidad y los nudos de la madera, de la textura del lino de los plaids, de las paredes con historia… La belleza de lo imperfecto, el wabisabi.
En pleno casco histórico de la Villa de Teguise, uno de los pueblos más bonitos de Lanzarote y de España, se encuentra este hotel boutique, situado en una casa de finales del S.XVII que le ha valido la categoría de Hotel Emblemático.
Una casa que había captado la atención a sus dueños, Eduardo y Sonsoles, y por la que pasaban en cada una de sus visitas a la isla, hasta que surgió la oportunidad de comprarla y dar vida a este proyecto.
Sus nueve habitaciones, cada una diferente, acogen al huésped y le hacen sentir bien a través de sus texturas, sus materiales naturales, su luz y su silencio. Espaciosas estancias de altos techos con artesonados de madera. Cada una con personalidad única, que hacen al huésped desear seguir descubriéndolas.
Las habitaciones se reparten en dos alturas alrededor de un agradable patio, punto de encuentro. Sentados en una de sus mesas podemos disfrutar de una copa de vino de la isla mientras conversamos, o de los riquísimos desayunos y cenas que sirven en su restaurante, o tal vez podemos pasar la tarde leyendo al sol alguno de los libros de su biblioteca o escuchando alguno de sus discos de vinilo…
El reloj de la torre de la iglesia nos recordará que debemos salir: tenemos una isla increíble que explorar. Saldremos, pero estaremos deseando volver a este hotel con historia donde vivir tu propia historia.